Para quienes tienen hijos a quienes se les ha recomendado el uso de lentes como parte de un tratamiento para corregir o controlar un defecto refractivo, el proceso de adaptación puede ser una tarea difícil. Aunque algunos niños y adolescentes se acostumbran al uso de lentes sin problema, para un alto porcentaje de ellos, este proceso puede tomar un tiempo considerable.De acuerdo con el Dr. Alejandro Lalama, jefe de Optometría de Óptica Los Andes (OLA),
Es muy común que los chicos se sientan incómodos al inicio, o inclusive que tengan temor a recibir burlas por parte de sus compañeros.” En ese sentido, el manejo del tema por parte de los padres resulta fundamental, pues si se lleva de manera adecuada, puede facilitar la habituación de sus hijos.