Alrededor de un 20% de la población ecuatoriana es infértil, según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), entre estas estadísticas, existe un 10% por causas desconocidas que no sean por problemas patológicos de la mujer o varón. Sin embargo, varios estudios revelaron que existe relación de la infertilidad con el estilo de vida y la alimentación de la pareja.
Así también lo afirma el Dr. Pablo Valencia, ginecólogo especialista y director médico del Centro de Reproducción Humana: La salud reproductiva se ha visto afectada por comportamientos poco saludables. Para esto se recomienda introducir en la alimentación de la pareja, una dieta equilibrada que contenga propiedades como el Omega 3, Coenzima Q10, la vitamina E, Hierro, Zinc y Selenio, nutrientes que beneficiarán y estimularán la fertilidad.
Omega 3
El Omega 3 es importante para la calidad de los óvulos, regula la ovulación e incluso retrasa el envejecimiento de los ovarios. Es un ácido graso que no puede producirse por sí mismo, por lo que se debe adquirir mediante la ingesta de alimentos como el salmón, pescado azul, verduras verdes, nueces, aguacate, entre otros.
Según un estudio reciente publicado en la revista ‘Antioxidants’, indica que el consumo de Omega 3 incrementan las posibilidades de embarazo y reducen el riesgo de padecer endometriosis.
Coenzima Q10 – Co-Q10
Es un antioxidante que el cuerpo produce de forma natural y ayuda para el crecimiento y mantenimiento de las células, regenerándose de manera efectiva y rápida, por lo que se recomienda su ingesta en alimentos como carnes blancas, verduras, legumbres, frutos secos, entre otros.
En una investigación de 2018, se descubrió que las respuestas ováricas de las pacientes de fertilización in vitro (FIV), mejoraron con suplementos previos de Co-Q10, demostrando que la calidad de la reserva ovárica, el óvulo y el embrión mejoran con la ingesta de este antioxidante.
Vitamina E
Es un nutriente importante para la salud reproductiva y es conocida como la vitamina de la fertilidad, esto debido a que incrementa la capacidad fértil en mujeres y en hombres. En el caso de la mujer, mejora la ovulación, regulando la producción de hormonas y en la maduración de ovocitos. Esta vitamina se encuentra en semillas, en frutos secos como las nueces, almendras, en vegetales verdes y aceites vegetales.
Hierro
Los bajos niveles de hierro pueden producir la anovulación, lo que dificulta el embarazo. En este caso es fundamental consumir alimentos ricos en hierro junto con vitamina C, como un zumo de naranja o en las proteínas animales y las legumbres.
Zinc
Es un nutriente esencial que impulsa la movilidad del espermatozoide a la llegada del óvulo. Es común en alimentos como el salmón, chocolate negro, el trigo, garbanzo, jengibre o las semillas de calabaza.
Selenio
Contribuye al desarrollo saludable del esperma. Está presente en huevos, carnes, pescados y frutos secos. Por ello, se recomienda consumirlo con tres meses de antelación para reforzar la calidad del semen, tiempo pertinente para que se desarrolle un espermatozoide sano.
La ingesta de estas vitaminas en el cuerpo favorecerá la fertilidad de la pareja. Por este motivo se debe mantener buenos hábitos alimenticios que son clave para que el organismo tenga condiciones óptimas a la hora de buscar un embarazo o en un proceso de reproducción asistida. Así mismo, es esencial la reducción de los niveles de estrés, ya que todos estos factores influyen mucho en la calidad del semen y de los óvulos.
Saludos cordiales