El río Nilo, el más largo del mundo, se tiñó de rojo el pasado 12 de noviembre de 2023. El fenómeno, que ha causado conmoción en todo el mundo, ha sido interpretado por algunos como una señal divina, mientras que otros lo atribuyen a causas naturales.
El Antiguo Testamento narra que, durante la última de las diez plagas que Dios envió a Egipto para obligar al faraón a liberar a los israelitas, el agua del Nilo se convirtió en sangre. Este pasaje bíblico ha sido recordado por muchos tras la reciente coloración del río.
Sin embargo, los expertos descartan que se trate de un milagro. Según ellos, el fenómeno es más probable que sea causado por una proliferación de algas rojas, un fenómeno natural que se produce periódicamente en el río Nilo.